Entrenar a tu gatito
Tu gatito aprende de dos maneras diferentes: comienza imitando las acciones de su madre y después a través de nuevas experiencias y refuerzos positivos. Aunque los gatitos son más independientes que los cachorros, es importante entrenarlos para que adopten el comportamiento adecuado desde una edad temprana y aprendan las reglas de compartir un hogar con otras personas y animales.
¿Por qué educar a tu gatito?
Tu gatito aprende de dos maneras diferentes: primero comienza imitando las acciones de su madre, y luego aprende por sí mismo, a través de la experimentación. Aunque los gatitos son más independientes que los cachorros, es importante educar a tu gatito para que adopte el comportamiento adecuado desde una edad temprana y enseñarles las reglas de compartir un hogar con otras personas y animales.
Cómo entrenar a tu gatito para reconocer su nombre
Enseñar a tu gatito a responder cuando le llamas por su nombre es más simple de lo que parece. Estos simples consejos deberían resultarte útiles.
- Elige un nombre corto sin demasiadas sílabas. Esto facilitará que tu gatito lo reconozca.
- Llama a tu gatito por su nombre para que se divierta o juegue, y repite su nombre durante la actividad. Este refuerzo positivo ayudará a tu gato a reconocer el nombre.
- Intenta no repetir el nombre cuando castigues a tu gatito ya que esto dará al nombre una connotación negativa.
- Di el nombre de tu gatito e inmediatamente dale un premio.
- O di su nombre y lánzale una bola de papel.
- Los gatitos suelen ser más receptivos cuando tienen hambre. Así que prueba estos ejercicios antes de las comidas.
Cómo entrenar a tu gatito a usar un arenero
La mayoría de los gatitos aprenden las bases del entrenamiento para hacer sus necesidades observando a su madre. Sin embargo, si tu gatito no sabe cómo se usa una bandeja de arena, deberás enseñarle. Enseñar a tu gatito a hacer sus necesidades antes de que adquiera malos hábitos puede ahorrarle a él y a ti una considerable ansiedad y estrés.
¿Por qué mi gatito no usa su bandeja de arena?
Hay varias razones por las cuales tu gatito podría no querer usar su bandeja de arena. A continuación se exponen algunas de las más comunes:
Limpieza
Es importante limpiar la bandeja de arena de tu gatito a diario, eliminar los olores fuertes y añadir arena fresca para gatos.
Tamaño
La bandeja de arena puede ser demasiado pequeña y que tu gatito no se siente cómodo usándola.
Ubicación
Si la bandeja de arena está en un lugar ruidoso o transitado, o demasiado cerca del comedero y bebedero, es posible que a tu gatito le dé ansiedad usarla.
Mala experiencia
Es importante no mirar o molestar a tu gatito mientras está en la bandeja de arena para evitar crear una asociación negativa
Cómo enseñar a un gatito a usar un rascador
A los gatitos les gusta instintivamente afilar sus garras. Para ayudarles a hacerlo sin dañar los muebles, es una buena idea invertir en un rascador y entrenar a tu gatito para que lo use cuando entre en tu casa por primera vez.
¿Por qué mi gatito no usa su rascador?
Cada gatito es diferente. Por lo tanto, si tu mascota no está usando su rascador, puede suceder que esté en el lugar equivocado, o tal vez no se vea o no huela muy bien.
El rascador siempre debe colocarse donde tu gatito pasa la mayor parte del tiempo. También deberías anotar cómo le gusta a tu gatito afilar sus garras en el poste. ¿Se estira sobre sus patas traseras? ¿O se estira en el suelo? Esta acción podría ayudarte a elegir un rascador más alto o una alfombrilla de rascado más larga para que coincida con los gustos del gatito.
Socialización de los gatitos
La socialización debe comenzar lo antes posible, para evitar cualquier comportamiento indeseado y ayudarles a desarrollarse como gatos adultos equilibrados y seguros de sí mismos. Descubre cómo puedes socializar a tu gatito.
Socializar a tu gatito
Nutrición a medida para gatitos
La nutrición para gatitos de ROYAL CANIN® favorece el crecimiento y el desarrollo proporcionando todos los nutrientes esenciales para cubrir las necesidades del gatito durante el primer año de vida.
Otras lecturas
